¿RECOMPENSA O CASTIGO?
Mediante la teoría del condicionamiento operante, Skinner plantea una nueva forma de aprender por medio de las recompensas y los castigos. En este sentido esta teoría considera que a través del mundo externo es que se proporcionan los elementos necesarios para lograr una determinada conducta.
De
allí que se hable de reforzamientos primario o intrínseco los cuales serán
consideradas respuesta que sí mismas son es reforzantes, es decir, aquella
respuesta que es por sí sola es una fuente de sensaciones agradables y la
acción se fortalece automáticamente cada vez que ocurre.
Ejemplo
de ello serían:
1.-
Las respuestas que satisfacen necesidades fisiológicas, como beber cuando se
tiene sed o comer cuando se tiene hambre.
2.-
Las actividades sociales que brindan
estimulación sensorial o intelectual son también con frecuencia intrínsecamente
reforzantes.
3.-
También pueden ser reforzantes por sí mismas todas las conductas que ayudan al
organismo a evitar algún daño.
4.- El tocar algún instrumento musical general una notable satisfacción, aun cuando
en sus inicios requirió de un esfuerzo para su dominio.
Por
su parte se conoce como refuerzos secundarios o extrínsecos aquellos donde el
premio o gratificación no forma parte de
la actividad misma, sino que obtienen su carácter de refuerzo por asociación
con los reforzadores primarios.
Ejemplo
de ello serían:
1.-
La cancelación monetaria por alguna labor realizada..
2.-
La aprobación social de nuestras acciones.
3.-
El reconocimiento público.
En
la actualidad los docentes, padres de familia y/o cuidadores ven con agrado y
satisfacción esta teoría pues considerar que gracias al castigo o la recompensa
se logran alcanzar las conductas que se desean observar en los niños y
adolescentes, sin embargo, hoy por hoy se reconoce el esfuerzo que el niño demuestra a lo largo del camino para
lograr esa modificación de conducta que
se desea alcanzar, haciendo más énfasis en recompensa que en el castigo como
tal.
Por
otra parte estas técnicas pueden ser útiles en el momento de acompañar los
procesos de aprendizaje de lecto-escritura en los niños y las niñas, ya que en
la medida en que reciban refuerzos positivos pueden llegar a fortalecer los avances y el desarrollo de las
competencias. En este sentido un niño que no se refuerce adecuadamente en el
aprendizaje, puede experimentar dificultades para desarrollar adecuadamente sus
competencias para leer y escribir.
por
otra parte hasta hace un tiempo el castigo corporal era una de las formas de
adecuar la conducta de un niño para lograr un comportamiento determinado. Sin embargo en la actualidad existen otros
tipos de acciones que lograr el mismo propósito como por ejemplo la suspensión,
eliminación, o control sobre algún objeto de gran interés para el niño.
Finalmente para lograr la modificación de conducta se
requiere:
1.-
Define claramente el comportamiento que
quieres modificar.
2.- Analiza
de qué manera se presenta (cuándo, en qué circunstancias, qué ocurre antes,
durante después…)
3.-
Determina un período para el cambio
4.- Establece
unas consecuencias que se presenten
pronto y que sean ajustadas y no desproporcionadas.
En
este sentido es necesario definir cuál
es el comportamiento adecuado y reflexiona si es alcanzable. La modificación de
conducta aumenta su efectividad cuando se realiza a través del refuerzo
modelado y moldeado de comportamientos
que se consideran adecuados y se reduce la utilización del castigo.
Puesta en práctica del Castigo Positivo en la serie televisiva "The Big Bang Theory".
Vídeo Condicionamiento Clásico/Operante
| Refuerzo y Castigo | Psicólogo Barcelona
Referencias:
1.- Campos, L. (1972). Diccionario
de Psicología del Aprendizaje. México: Ciencia de la Conducta.
2.- Mora , J. (1985) Psicología del aprendizaje
Disponible en:
Excelente compañeras, muy buena y completa la información que acá suministran.
ResponderEliminarExcelente compañeras, muy buena y completa la información que acá suministran.
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